domingo, 19 de enero de 2014

Broken Sword V: The Serpent's curse I
Una opinión muy personal



George Stobbart está de vuelta compañeros. Ya en posts anteriores realicé una humilde apología del advenimiento de este quinto y esperadísimo "profeta", y que finalmente fue lanzado hace poco más de un mes.

El vergonzoso hecho de publicar este dictamen baladí cuarenta y siete días después de su lanzamiento es una mera cuestión de tiempo personal, y no debido, por desgracia para todos y como explicaré en sucesivas líneas, a la duración de la propia aventura.

Para aquellos que conserváis en vuestras memorias el melancólico recuerdo otoñal del primer título de la saga (y a mi juicio el mejor), su quinta parte no podría comenzar mejor. Unos evocadores y familiares acordes acompañando presidencialmente al emblemático logo de Revolution Software, os harán levitar en vuestros asientos ante el simple recuerdo de aquellos viejos tiempos. Pero por pura desventura, tan solo para dar paso a una pobre introducción (técnicamente hablando), induciendo un brusco retorno a tierra de vuestros intrépidos traseros voladores. El video en cuestión parece haber sido construido con el propio motor gráfico del juego, y este se ha mostrado ciertamente insuficiente para que los actores (modelados en 3D), se fusionen adecuadamente con el escenario bidimensional. Tal aparente falta de mimo, hizo temerme lo peor para lo que se avecinaba. Quizás mi ansia y expectación por el retorno de la espada rota, haya resultado en una exigencia irracional en el apartado visual, que nunca he considerado demasiado importante, pero esta ha sido mi sensación inicial, y así he de contarlo.

Por fortuna, mi descontento se disipó en el preciso momento que, ratón mediante, "encarné" una vez más al siempre joven George Stobbart. El motor gráfico se comporta más que bien en tiempo de juego, para lo que sí ha sido diseñado. Un aspecto visual sólido, atractivo y en conjunto muy bien integrado, volatilizó mis miedos, mientras clickaba a discreción más feliz que Isidoro en una pescadería, inmerso en una historia de la que ya quería saber más. El prólogo sí cumplía pues, su cometido principal: enganchar. 

Respecto al apartado sonoro, como ya he dejado entrever una decena de líneas más arriba, el equipo de Revolution Software emula sin fingimiento (bajo mi punto de vista, con gran acierto) al inefable Broken Sword I, y no exclusivamente en su música ambiental. ¿Quién no recuerda aquella alegórica melodía, augurio de algún intrincado puzzle al fin resuelto?. El doblaje raya el sobresaliente, aunque si bien las fabulosas interpretaciones de los actores que ponen voz y vida al carismático conglomerado de personajes alcanza lo excepcional, no sucede así para la deficiente sincronización labial, que deja una pequeña muesca en la calidad del conjunto.

Huelga decir que, el grupo comandado por Cecil siempre ha sabido desmenuzar con maestría cualesquiera que sean las historias que guían a sus aventuras gráficas. The Serpent's Curse no es una excepción, y el desarrollo de su trama bien hilada no sufre altibajos, manteniendo el interés del jugador constante, aunque a muy a costa quizás, de una exagerada sencillez en los retos que se nos plantean (y alguno metido a calzador, para muestra véase puzzle de los mentos con cola).

Podría ser que, debido a la mencionada falta de desafío para el aventurero, la relativa rapidez con la que se avanza, acorte un juego ya de por si, breve. Cierto es que, por decisión de última hora, se ha dividido en dos partes, pero el equipo de Broken Sword 5: La maldición de la serpiente aseguraba previo lanzamiento (en uno de esos mails que periódicamente recibíamos los "backers" de Kickstarter) lo siguiente:
                  "each episode is a full sized game in its own right"     
Bien, o eso pensé al menos la primera vez que lo leí, y además, me lo creí. Os escribe un gamer paciente, de esos que se toma su tiempo antes de avanzar, que explora cada rincón y opción a conciencia, sin más prisa de la necesaria. Ocho horas y cinco minutos (pausas para largas visitas al "trono de la Roca" incluidas) es el tiempo exacto que se ha contabilizado en mi partida. ¿Es esta la duración de un "juego de tamaño completo por derecho propio"?. Supongo que es una cuestión muy subjetiva, y para unos más que para otros ;). 

Verdaderamente, la trama es interesante, aunque no lo suficientemente profunda. Me explico. Todo fan de la saga que se precie, ha disfrutado en todos y cada uno de los episodios de la serie, de esa magia singular que rodea al esoterismo histórico que impregna íntegramente las aventuras de George Stobbart. En esta quinta parte se intuye esa herencia, y he ahí el problema. Tan solo se intuye. El deshilachamiento de ese nudo de enigmas nunca se produce, provocando que el guión se reduzca a una larga introducción sobre un curioso asesinato por causa de un misterioso cuadro catalán: La maledicció (del cual he investigado, y nada he encontrado, ¿ha sido creado para lo ocasión?, ¿se ha perdido esa base histórica real que apoyaba a la saga?).

No añadiré más. Quizá mi opinión os resulte crítica en demasía, sospechando un pérfido descontento por mi parte con la obra que nos ocupa, pero nada más lejos. No podría afirmar sin caer en la mentira, que el juego no me haya gustado. En general, atesora una muy buena calidad, y lo he disfrutado, mucho, pero con pequeñas decepciones, que se han visto magnificadas por las expectativas desmesuradas quizá poco razonables de este ávido explorador, ansioso por el retorno de La espada...